Cuáles son los tipos de liderazgo que hay y qué es realmente el liderazgo

Tipos de liderazgo

El liderazgo es la cualidad más deseada y menos entendida por la mayoría. De hecho, si hay algo que he visto estos 20 años tratando con empresas y organizaciones (de todo tipo y tamaño) ha sido que, precisamente, en todas las estructuras de mando y jerarquía de muchos negocios el liderazgo brillaba por su ausencia. Por eso, hoy vamos a ver los diferentes tipos de liderazgo, entender de verdad el concepto y comprender cómo es, y se comporta, un verdadero líder.

Como veremos, la cuestión tiene matices sutiles e importantes, además de que el liderazgo y el poder no siempre van unidos en la teoría del liderazgo.

Así que, comencemos por el principio y tengamos bien claro qué es el liderazgo. El verdadero, quiero decir.

Qué es el liderazgo

Qué es el liderazgo

Aparte de uno de los conceptos peor entendidos por la mayoría, el liderazgo es, en gran parte, poder, eso es innegable. Pero, sobre todo:

Es la capacidad para conseguir un objetivo, principalmente mediante la facultad de conseguir que otras personas se nos unan y trabajen junto a nosotros para lograr dicho objetivo.

Aquí estamos definiendo el verdadero liderazgo y, como se puede apreciar, me he cuidado de decir que «nos obedezcan» o se hable de jerarquías.

Hablo de aglutinarse voluntariamente en torno al líder y que este no sea obedecido, sino seguido con convicción en lo que quiere hacer.

Como vemos, esto es muy distinto al concepto de liderazgo que muchos tienen en la empresa y que se basa en el: «Yo ordeno y tú mandas».

Algunos tipos de liderazgo que vamos a ver, como el tradicional o burocrático, establece jerarquías y tiene esa capacidad de cambio y movilización mediante las estructuras de poder (y de mantenimiento de ese poder) que haya establecidas.

Es decir, que un capitán conseguirá que un sargento haga lo que le ordene por el mero hecho de sus galones (y de las consecuencias en caso de no hacerlo), igual que un jefe de equipo conseguirá casi siempre que, un consultor por debajo de él en el organigrama de la empresa, haga lo que le diga.

Pero eso no necesariamente significa que el capitán o el jefe de equipo tengan un «verdadero liderazgo».

De hecho, muchas veces se aprecia el verdadero liderazgo en situaciones de incertidumbre o momentos de crisis, donde los rangos y estructuras de poder tradicionales no sirven.

En estos casos, surgen los mal llamados líderes carismáticos o «naturales» o, mejor dicho, aquellos que comprenden la naturaleza de liderazgo real y la aplican de acuerdo a la situación en la que se encuentran.

Los estilos de liderazgo que existen

Las clasificaciones de liderazgo pueden ser muchas y muy diferentes, pero normalmente, tendremos 7 tipos de liderazgo principales. El resto de clasificaciones más extensas son artificiales o confunden un único tipo de liderazgo con varios.

Esos 7 tipos de liderazgo principales son:

  1. El líder tradicional.
  2. El líder burocrático.
  3. El líder autoritario o autocrático.
  4. El líder democrático.
  5. El líder que deja hacer o delega casi todo.
  6. El líder carismático o «natural».
  7. El líder transformacional o visionario.

Vamos a ver en detalle cada una de estas clases de liderazgo para entenderlas bien, porque, como veremos, aunque ciertos estilos de liderazgo no sean recomendables muchas veces, el buen líder debe conocer, reconocer y manejar estas 7 clases de liderazgo con soltura.

1. El líder tradicional

Liderazgo tradicional

Es el líder de toda la vida, con un liderazgo basado en su cargo empresarial, militar, político, su apellido, su herencia…

Inmerso en una estructura de poder, que es la que respalda su capacidad de ejercer un cambio y liderar, el líder tradicional no es bueno ni malo por sí mismo.

Su poder viene otorgado por lo que pone en la puerta de su despacho y la cadena de mando. Sin embargo, puede ser un líder excelente al que la gente sigue por convicción o un líder de estilo autocrático, como el que veremos más adelante y que solo consigue obediencia por coerción. En esos casos, la gente hace lo que dice porque no quiere perder el empleo o recibir un castigo.

Este liderazgo es muy contextual. Es decir, alguien puede tener un liderazgo tradicional poderoso en un hospital si es el jefe de cirugía, pero ninguno cuando está en otro contexto, como por ejemplo, un bar. Otro tipo de líderes, como puede ser el carismático, pueden ejercer mayor liderazgo en muchos tipos de contextos.

Este es también un liderazgo unidireccional. El líder tradicional influye en todos aquellos que están por debajo en la estructura de la organización y los que están debajo, salvo muy contadas excepciones, no pueden influir sobre él ni modificar sus órdenes.

Este es el mundo real y no una película. El 99% de veces, son líderes tradicionales los que ejercen el poder en la mayoría de situaciones y, para poder ejercer ese cambio, necesitaremos liderazgo tradicional, aunque tengamos un liderazgo transformacional.

No estamos en una película, el segundo sin el primero no sirve de nada, no vamos a iniciar una rebelión en nuestra empresa y hacernos con ella a causa de nuestro carisma.

Sin liderazgo tradicional, no tendremos nada y el juego del liderazgo consiste también en jugar a la política interna que permite el ascenso dentro de la estructura de poder en la que nos veamos inmersa. Al menos en jugar hasta que estemos arriba del todo.

Ventajas y desventajas del liderazgo tradicional

  • La principal ventaja es que está entre los estilos de liderazgo más sencillos de ejercer, porque está entre los más potentes y necesarios. Eso sí, si tienes una buena estructura de poder y eres un líder con cabeza que combina el resto de liderazgos que vamos a ver.
  • La principal desventaja es que no significa nada por sí solo y que otorgar liderazgo tradicional no es garantía de nada, especialmente, de éxito.

2. El líder burocrático

Bill Gates, ejemplo de liderazgo burocrático

Es el que sigue las reglas y los procedimientos. Sus decisiones siempre estarán movidas por estos procesos ya establecidos y pocas veces tratará de cambiarlos.

Esto no significa que sea malo, al contrario. Recordemos que esto no es una película. Por eso, el liderazgo burocrático es un estilo necesario, especialmente en el liderazgo empresarial y en segmentos más bajos de la estructura de poder, para que todo funcione bien.

Muchas veces, los procesos en una empresa están hechos de una determinada manera porque se ha comprobado que son los más eficientes. Si estos son buenos, has de seguirlos.

Por ejemplo, en franquicias como Burger King, esos procesos se han afinado al máximo y el buen líder es el burocrático que los hace cumplir, porque eso dará los mejores resultados.

El líder burocrático suele estar también muy orientado a la tarea, no a las personas. Esto, de nuevo, tampoco es necesariamente malo, porque lo importante es el objetivo. Sin embargo, el ejercicio de liderazgo requiere un equilibrio entre ambas cosas.

Céntrate mucho en la tarea y las fechas límite, sin atender a las personas, y las quemarás, resintiendo de paso la ejecución de dicha tarea. Céntrate mucho en las personas sin atender a la tarea, y muchas veces se quedará sin hacer.

Este también es un liderazgo transaccional y pragmático. El líder hace su trabajo a cambio de un sueldo y espera que los demás también obedezcan a cambio de lo que reciban. Del mismo modo, a la hora de solventar problemas, recurre a eso, a aumentar lo que recibe el otro en la transacción si le obedece.

Suele estar bien, pero a veces se queda corto para ver el problema real.

Ventajas y desventajas del liderazgo burocrático

  • La principal ventaja es que, cuando los procesos del negocio están bien afinados, puede ser el liderazgo empresarial más recomendable.
  • La principal desventaja es la poca capacidad de cambio. Si los procesos no son buenos, o hay momentos de crisis y cambios, no es el liderazgo adecuado.

3. El líder autoritario o autocrático

Liderazgo autoritario

Es el «ordeno y mando», que muchas veces no tiene en cuenta comentarios constructivos o ideas si estas vienen desde abajo.

Ejerce un poder respaldado por la estructura de recompensas o castigos sobre las que está basado. Por ejemplo, la amenaza de perder el trabajo si el subordinado no obedece.

De nuevo, como todo esto no es blanco y negro, el estilo de liderazgo autoritario puede ser fundamental, especialmente en algunas tareas. Por ejemplo, en operaciones militares o situaciones de urgencia, es necesaria una férrea estructura a la hora de obedecer y ordenar para que todo salga bien.

Dicho esto, la principal desventaja es que, muchas veces, si no se explica o convence de los porqués, el liderazgo autocrático lleva al resentimiento. Personalidades rígidas ávidas de poder tienden a este estilo de liderazgo y puede ser muy nocivo.

Ventajas y desventajas del liderazgo autoritario

  • La principal ventaja es su capacidad de ejercer un cambio rápidamente cuando es necesario y sin vacilar. Por ejemplo, en situaciones de crisis no suele ser un mal líder.
  • La principal desventaja es que es un estilo de liderazgo muy dado a la ceguera, que erosiona al equipo, hace que los mejores se marchen y se resientan.

4. El líder democrático

Liderazgo democrático

El líder democrático es lo contrario del autoritario. Trata de ejercer un liderazgo participativo. 

Este es un liderazgo positivo, siempre que no nos pasemos. Una pieza clave del liderazgo real es escuchar, pero eso no significa hacer lo que nos digan.

De nuevo, ser un buen líder es un ejercicio de equilibrio. Debes conceder autonomía y capacidad de decisión al equipo, hacer el acto participativo, pero en algunas situaciones eso puede resultar incluso contraproducente. Por ejemplo, en momentos de guerra, un liderazgo democrático siempre ha sido desastroso en el campo de batalla.

Al final, alguien tiene que tomar la decisión y llevar el peso de las consecuencias, y ese tiene que ser el líder. De hecho, muchos líderes que se llaman democráticos son, en realidad, líderes débiles que no son capaces de soportar el peso y por eso diluyen la responsabilidad en los demás.

Ventajas y desventajas del liderazgo democrático

  • La principal ventaja es que, bien llevado, este estilo de liderazgo es duradero, reúne lo mejor de todo el equipo y crea buen ambiente.
  • La principal desventaja es que los que están por debajo tenderán a aprovecharse y confundir la participación con debilidad de liderazgo, algo que debe ser atajado irme y rápidamente, pero con guante de terciopelo.

5. El líder que deja hacer o delega casi todo

Liderazgo Laissez-faire

Es un paso más del líder democrático, pero no en la buena dirección. A veces llamado del laissez faire en honor a la doctrina económica del dejar hacer, este tipo de líder delega casi todo y no hace nada.

En ocasiones, no hacer nada es el mejor curso de acción, pero estos líderes lo llevan al extremo y, de hecho, son lo contrario a un líder.

No quieren responsabilidades, se escudan en que no quieren ejercer un liderazgo autocrático, pero en realidad no se atreven a tomar decisiones. En no pocas ocasiones, se han encontrado el puesto porque la estructura de poder en la que están inmersos los han visto una pieza útil e inofensiva que no pondrá en peligro el equilibrio de poderes.

Si bien no podemos hablar de «liderazgos malos» porque no existen blancos o negros puros en la vida, es el tipo de líder menos recomendable junto con el autoritario.

Ventajas y desventajas del líder que deja hacer

  • La principal ventaja es que, si tiene un equipo que resulta un póquer de ases, quitarse de en medio y dejarles hacer dará los mejores resultados. Esos casos son muy raros, los equipos de ases tienen egos enormes, es necesario gestionarlos y este tipo de líder, en muchas ocasiones, no lo hará.
  • La principal desventaja del líder que deja hacer es que se convierte a menudo en un pelele

6. El líder carismático o «natural»

Steve Jobs, ejemplo de liderazgo carismático

Este es el supuesto líder nato, el que, ya desde muy pronto, ejercía una capacidad de aglutinar a la gente a su alrededor y hacer que la siguiera en lo que quería hacer.

Inspira el deseo de seguirle como persona. Normalmente, tiene cualidades naturales que, por razones de historia y evolución, hemos identificado en líderes desde los primeros tiempos. Puede ser el aspecto, su capacidad de habla, de empatía…

En realidad, no existe el liderazgo natural, porque nadie nace líder.

Hay gente que, gracias a ciertas cualidades físicas o que ya le vienen dadas (altura, aspecto, poder, herencia monetaria, etc), ejerce de líder desde muy pronto. Lo más parecido a un líder nato es aquel que nace en una familia con poder. Sin embargo, el liderazgo es siempre aprendido y esa persona poderosa por nacimiento puede no convertirse nunca en verdadero líder.

Ventajas y desventajas del liderazgo carismático

  • La principal ventaja es que está entre los estilos de liderazgo más poderosos. La obediencia es deseada por aquellos que hacen lo que dices, lo que otorga una enorme influencia. Además, quien es verdaderamente carismático puede tener liderazgo en muchos contextos, aparte del que tiene cuando está en su empresa o dentro de su estructura de poder habitual.
  • La principal desventaja es que es el tipo de liderazgo más peligroso y fugaz. Un líder natural, asociado a una mala visión, puede inspirar acciones terribles. Además, es muy dado al culto de la personalidad, la ceguera y la sordera. Puede arruinar todo en un segundo y quemar a su capital humano, creyendo que, como siempre, tiene razón y su carisma le salvará.

7. El líder transformacional o visionario

Elon Musk, el ejemplo de líder transformacional y visionario

Inspira el deseo de seguir su visión y hacerla realidad. En muchas ocasiones, las cualidades de esa visión se proyectarán sobre su persona y se fundirá con el líder carismático, aunque no sea claramente un líder natural.

Elon Musk es el paradigma de liderazgo transformacional o visionario. Quiere moldear la realidad de acuerdo a una visión que inspira a muchos.

Obviamente, Musk no es un líder natural. Él mismo lo reconoce, está en el espectro casi autista, le cuesta comunicarse y se nota que no fue de esas personas que, desde pequeño, ya fueron capaces de liderar con su labia o su aspecto.

Steve Jobs, sin embargo, es el ejemplo de liderazgo carismático y transformacional a la vez. Al menos desde fuera. Desde dentro, era también un líder autocrático que trataba fatal a sus empleados y era muy dado a todos los defectos del carisma. Tanto, que se vieron obligado a echarlo de su propia empresa.

Sin embargo, es innegable que su liderazgo empresarial fue espectacular, levantando a Apple de la ruina tras su retorno.

Ventajas y desventajas del liderazgo visionario o transformacional

  • La principal ventaja es que este liderazgo visionario crea una adhesión casi total a tu causa. Muchas veces, no tienes que ordenar nada, la gente ya se pone delante para detener las balas que te disparan.
  • La principal desventaja es que la visión suele ser tan luminosa que son líderes dados a la ceguera y la pérdida de la inteligencia emocional. El triunfo de una visión en un aspecto les hace creer que van a tener la misma razón en todo, perdiendo la humildad. Otra cualidad clave, aunque no lo parezca, del verdadero líder.

Vistos ya los principales tipos de liderazgo, analicemos la pregunta clave.

¿Cuál es el mejor tipo de liderazgo?

Para responder a esta pregunta, retomemos a Steve Jobs. Líder carismático, visionario y autocrático a la vez. Eso ya nos da una pista.

El mejor tipo de liderazgo es flexible y usa los 7 tipos que hemos visto como herramientas para cada situación concreta, según la que sea adecuada en el momento. En la mayoría de ellas, el líder usará su liderazgo por personalidad, pero, sobre todo, debe ser capaz de saber usar el liderazgo según la situación.

Estos son dos conceptos importantes, así que veámoslos más a fondo.

El liderazgo según personalidad

Hay personalidades más afines a ciertos tipos de liderazgo. Bill Gates es tradicional, un liderazgo transaccional, basado en procesos eficientes. Será el rasgo dominante según su forma de ser, aunque, como todo líder exitoso, presenta varios estilos, como el de haber tenido una visión clara para Microsoft en su día.

Es por eso que el liderazgo por personalidad, con el que seamos más afín, será el que más usemos y al que recurramos por defecto.

Sin embargo, un buen líder parte de la personalidad, pero siempre, absolutamente siempre, tiene en cuenta la situación en la que se encuentra para adoptar el estilo de liderazgo orientado a lo que sea necesario. Los 7 tipos de liderazgo que hemos visto conforman su caja de herramientas y coge la adecuada según la situación.

Nos puede encantar usar el martillo y ser nuestra herramienta favorita, pero el martillo no es lo ideal cuando tenemos que atornillar. 

El liderazgo según la situación

Para el día a día, usaremos el estilo de liderazgo más afín a nosotros, pero para situaciones críticas, hemos de leer bien dicha situación, al resto del equipo a nuestro cargo y elegir el tipo de liderazo más adecuado.

A veces, ese curso de acción implica romper el procedimiento y otras veces dar un golpe en la mesa y ser un líder autocrático, aunque casi siempre tengamos un liderazgo orientado a la participación.

Las mejores cualidades de un líder

Barack Obama - Ejemplo de liderazgo.

Cuando uno busca en Internet las cualidades de un buen líder, aparecen una serie de artículos de fantasía que dicen cómo tiene que ser. Pero no hace falta recurrir a lo que suena bien o encaja en lo que creemos, la ciencia ya ha analizado las cualidades de un buen líder.

Estas son:

1. Inteligencia y toma de decisiones orientadas a la acción.
2. Acepta la responsabilidad de las decisiones anteriores.
3. Competente en su trabajo.
4. Entiende a los seguidores y sus necesidades.
5. Don de gentes.
6. Necesidad de logro
7. Capacidad para motivar a la gente
8. Coraje y resolución
9. Perseverancia
10. Se puede confiar en él.
11. También confía en sí mismo
12. Cultiva la asertividad
13. Es adaptable y flexible
14. Muestra una estabilidad emocional
15. Cultiva la creatividad

Esas 15 características ya las analizamos a fondo en Recursos para Pymes hace tiempo. Por eso, recomiendo que, si le interesa saber más de liderazgo empresarial real, visite el artículo sobre rasgos de un buen líder.

Como vemos, hay muchos tipos de líderes y debemos conocerlos. No vale solo el liderazgo visionario o el carismático, por muy atractivos que parezcan.

Son piezas y herramientas que debemos usar a discreción. A veces será el liderazgo transaccional y burocrático, y todo consiste en subir el sueldo para arreglar algo. Otras veces será el transformacional, porque, sin una causa que le llene, nuestro equipo se irá aunque esté bien pagado.

Sea como sea, aprendiendo bien los tipos de liderazgo, reconoceremos más fácilmente cuál nos encaja y cuál hace falta en cada situación.

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