Hace un tiempo, hablábamos de cómo resolver problemas y tener mejores ideas. Porque al final, emprender y tener un negocio trata principalmente de eso.
Algo que también se puede resumir en que la clave es pensar mejor.
¿Se puede conseguir eso? Por supuesto. Podemos mejorar esa manera de pensar, hacerla más efectiva, ver lo que los demás no ven y encontrar las soluciones que se le escapan al resto.
Y para conseguirlo, además de las técnicas que vimos en el contenido que ya he comentado, existen los modelos mentales.
Los modelos mentales y su uso en el día a día
¿Qué son los modelos mentales?
Este concepto, popularizado por Charlie Munger, el eterno compañero de Warren Buffet y uno de los inversores más exitosos de la historia, hace referencia a modos de pensar que nos permiten hacerlo mejor, marcos de trabajo que abren diferentes perspectivas y nos ofrecen una imagen completa de la situación y de sus posibles soluciones.
Los modelos mentales son formas de pensar que provienen de las más diversas disciplinas. Desde la economía hasta la física, pasando por la psicología, la historia o las matemáticas. Conocer más modelos mentales, como el de primeros principios o las consecuencias de segundo orden, implica poder analizar una situación de más maneras.
Eso permite ver todos sus vértices, observar las partes ocultas para muchos, analizar más a fondo, ser capaces de profundizar más…
En definitiva, pensar mejor.
«Para quien tiene un martillo en la mano, todo son clavos». Eso significa que tendemos a aplicar las mismas pocas soluciones y mentalidades a todo, pero el mundo es complejo. No todo se resuelve de la misma manera y tener una caja de herramientas, con solo un martillo, no será óptimo para arreglar la mayoría de cosas que necesitemos.
Conocer más sobre modelos mentales y diferentes formas de pensar y enfocar las situaciones nos permite añadir más herramientas a nuestra caja. Y sobre todo, nos permite conocer cómo usarlas.
Es por eso que con nuestra caja bien repleta estaremos en posición de afrontar todas las situaciones de la mejor manera.
De hecho, los mejores usan a menudo esos modelos mentales, siendo Elon Musk uno de sus principales proponentes.
En estos 20 años como emprendedor, dedicado a muchas cosas y tras haber hecho crecer un montón de iniciativas distintas, me he dado cuenta de que la mejor inversión que he hecho no ha sido en ninguna de ellas. Ha sido en mí. Porque cuando me he preocupado de tratar de saber un poco más, mejorar mi manera de pensar y abrirla a más perspectivas y formas de análisis, eso me ha permitido lanzarme al ruedo de nuevo con más probabilidades de conseguirlo.
Y sobre todo, con menos probabilidades de fracasar, porque no voy empleando un martillo cuando hay que atornillar o cortar.
Al final, emprender implica aprender: persuasión, negociación, resolución de conflictos, finanzas, marketing y ventas… La habilidad de pensar mejor hace que todas esas cosas pasen al siguiente nivel. Y una de las maneras más sencillas de que nuestro modo de pensar pase también a ese siguiente nivel es a través de los modelos mentales.
Es algo que me apasiona tanto, que no he podido evitar dedicar toda una web entera a esos modelos mentales.