Lo que decimos y lo que hacemos

Acabo de dejar un informe sobre Marketing que me han enviado por e-mail y resulta francamente interesante por muchas razones, pero una de ellas es la diferencia que hay entre lo que decimos y lo que realmente hacemos.

Una pequeña muestra:

Un 77% de negocios piensa que su web tiene actualmente una importancia de moderada a crítica en la generación de "leads" y clientes, y que en un periodo de 2 años máximo tendrá una importancia moderada a crítica para el 98% de dichos negocios. Es decir que consideran su web como un instrumento muy relevante para generar interesados y clientes.

Sin embargo un 96% de esos mismos negocios consideran que tienen un resultado de bajo a moderado en conseguir esos interesados a clientes.

Dos de las tres principales razones citadas por las que no obtienen mejores resultados son "Falta de conocimiento" y "Falta de tiempo".

Imaginemos esta situación: nos dedicamos a la distribución de un pequeño producto y tenemos un vehículo para desplazarnos, es algo que consideramos muy importante para nuestra comodidad y rapidez a la hora de movernos, lo cual es vital para nuestra actividad, sin embargo, como ese coche nos resulta algo nuevo apenas lo usamos o extraemos rendimiento porque no sabemos como funciona y  no tenemos tiempo para ponernos a aprender a manejarlo.

Pero pensamos que el coche es importante, que si supiéramos conducirlo nos traería mayor volumen de negocio porque nuestra capacidad de repartir se multiplicaría, sin embargo a pesar de que invertir en usarlo nos resultaría vital para mejorar los resultados no lo hacemos, no sabemos cómo y no tenemos tiempo para aprender… ¿qué hacemos entonces durante el día a día? Seguimos como siempre, repartiendo a pie, teniendo el coche parado, tardando un montón de tiempo entre viaje y viaje, tanto que, obviamente, no nos queda tiempo para aprender.

La situación del coche es a todas luces ilógica, es obvio que si de verdad consideramos que podemos hacer más negocio con él dedicaremos unos días a buscar a alguien que nos enseñe y a sacar tiempo de donde sea para practicar. Cualquier puede ver que en poco tiempo compensará lo invertido gracias a la mayor movilidad y comodidad que nos proporciona.

Sin embargo he ahí casi un 80% de negocios que piensa que ahora mismo su web puede ser crítica para conseguir clientes pero no hacen nada para convertirlo en realidad… y alegan falta de conocimiento (superable con cualquier persona que sepa y enseñe) y "falta de tiempo".

Si como empresa alegamos "falta de tiempo" para no ponernos con lo que creemos que es crítico para generar clientes deberíamos plantearnos bien en qué estamos dedicando el tiempo entonces… si el propósito de una empresa es generar clientes pero no "tenemos tiempo" para hacer eso ¿qué estamos haciendo entonces?

Probablemente lo que estemos haciendo sea apagar los fuegos que diariamente surgen en las pymes, imprevistos, urgencias y demás que nos apartan de los realmente importante y devoran todo nuestro tiempo. Cualquier que es emprendedor conoce esa sensación y esa hilera de problemas chillones que desfilan cada día por nuestra jornada de trabajo.

Esos son nuestros peores enemigos porque no tienen que ver con lo que de verdad nos va a traer clientes, nos consumen una enorme cantidad de tiempo y dejan muy poco valor a cambio.

De todas fomras lo que más curioso me resulta es esa disonancia constante entre lo que decimos y hacemos, no sólo en el ámbito de la empresa, sino en cualquiera. El Marketing, la empresa y las relaciones tienen como base el comportamiento humano y cómo a veces ese comportamiento desafía las leyes de la lógica… como decir que algo es fundamental pero luego no ponernos con ello.

Está clara una cosa, que el que esté libre de pecado que tire la primera piedra… pero aún así no es excusa, con que peleemos un poco más que los demás porque lo que sale de nuestros labios sea lo mismo que hacemos con nuestras manos ya tendremos una enorme ventaja sobre la mayoría de empresas, pymes y emprendedores que compiten contra nosotros.

Scroll al inicio